Mejor hacer uno, que declamar diez

En el título hago referencia a que siempre es mejor, cuando tenemos un problema, hacer al menos UNA cosa encaminada a solucionarlo, por más que parezca poco, que pensar diez soluciones posibles, sin aplicar ninguna porque cada vez nos aparece una que creemos es mejor que la otra. No podemos dejar que lo perfecto tape lo bueno, que por tratar de no hacer nada hasta que "tengamos lo mejor", se nos pasen los tiempos, y en comercialización no podemos dormirnos ni un minuto, porque lo no hacemos nosotros, seguramente la competencia sí lo hará y cuando nos demos cuenta, será muy tarde para lamentarnos.
En comercialización siempre que afrontemos una crisis, o que la visualicemos a futuro y tengamos la posibilidad de intentar una defensa, es necesario comenzar en forma urgente con acciones puntuales aunque parezcan pequeñas, hasta tanto podamos diseñar una estrategia completa, pero NO PODEMOS quedarnos sentados esperando el gran plan sin actuar, porque si ese gran plan nunca llega o se demora más de la cuenta, será demasiado tarde para ensayar una reacción.